El zumo de uva concentrado (mosto) es un ingrediente valioso para la industria alimentaria y de bebidas. ¿Las razones? Son múltiples. Este jugo de frutas es versátil y aporta gran cantidad de beneficios. Se utiliza para enriquecer el perfil nutricional de diversos productos comestibles, endulzar postres y bebidas, mejorar texturas o para proporcionar un color intenso y natural, permitiendo ofrecer a los consumidores alimentos más atractivos y saludables. Además, en su forma concentrada resulta una materia prima con grandes ventajas para su transporte y almacenamiento.
Sin embargo, es la calidad del mosto de uva el factor crítico que determina su valor. Preservar esta excelencia es esencial. Pero no hablamos sólo de su calidad inicial, también es imprescindible mantener su integridad y todas sus características beneficiosas a lo largo de las etapas de almacenamiento y expedición. En este post exploramos aspectos claves del almacenamiento, embalaje y transporte del zumo de uva concentrado, indispensables para preservar su alta calidad y garantizar que llegue a las manos del cliente con sus cualidades intactas.
- La calidad del zumo de uva blanco y tinto
- El almacenamiento del mosto
- Transporte del zumo de uva: mosto a granel
- JULIÁN SOLER: mosto de calidad durante todo el año
La calidad del zumo de uva blanco y tinto
Un jugo de uva concentrado de alto valor se logra mediante un meticuloso cuidado en cada etapa de su proceso de elaboración, desde la gestión del viñedo y la selección de uvas en su punto óptimo de maduración hasta la elección del transporte adecuado. Por ejemplo, durante su producción, el proceso de concentración debe realizarse bajo condiciones controladas y con tecnologías avanzadas, para obtener un zumo denso, con excelente aroma afrutado, dulce sabor y un elevado valor nutricional. Además, se debe garantizar el control de la temperatura, la acidez, los niveles de azúcar, etc.
Estas propiedades organolépticas (color, aroma y sabor) y nutricionales (vitaminas, minerales y antioxidantes) del zumo concentrado de uva también deben mantenerse intactas durante su almacenamiento y transporte a granel. Para lograrlo es importante:
- Garantizar la cadena de frío.
- Prevenir la contaminación.
- Proteger al mosto de la oxidación.
- Minimizar la pérdida de color del concentrado de uva.
El almacenamiento del mosto
En el proceso de elaboración del zumo de uva concentrado se llevan a cabo dos fases de almacenamiento. En primer lugar se debe almacenar el mosto flor. Recordemos que el mosto se obtiene del prensado de la uva y la aplicación de determinados métodos de concentración. Básicamente, se somete a la fruta fresca a un estrujado suave, en el que se obtiene el primer jugo denominado mosto flor. Este primer zumo se almacena en depósitos de acero inoxidable AISI 316, un material de calidad alimentaria y con alta resistencia a la corrosión, higiénico y que no reacciona a sustancias ácidas ni alcalinas. En Julián Soler, podemos alcanzar un almacenamiento de mosto flor de más de 20 millones de litros.
Para continuar con la elaboración del zumo concentrado de uva, el mosto flor se lleva a un proceso de evaporación bajo vacío y es filtrado utilizando membranas de polipropileno. Así se obtiene un concentrado de jugo de uva de 65° a 68° Brix, que debe ser preservado en condiciones óptimas
- Almacenamiento del zumo de uva concentrado. Este almacenamiento debe garantizar que el mosto mantenga su calidad e intensidad del color hasta que sea envasado para su despacho.
- Una de las alternativas populares es el uso de tanques de acero inoxidable herméticos, con un sistema de enfriamiento que desciende la temperatura del mosto para evitar su oxidación.
- También pueden utilizarse cámaras frigoríficas o de congelación para conservar el mosto en bidones. Estas cámaras mantienen los niveles óptimos de temperatura, humedad y circulación del aire requeridos para garantizar la disponibilidad de un concentrado de uva de alta calidad, en el momento en el que lo necesite el cliente.
Congelación del concentrado de uva
Es un método efectivo para preservar la integridad y calidad del mosto a largo plazo. El almacenamiento bajo congelación debe llevarse a cabo a una temperatura de -18° C o menos, para evitar la pérdida de atributos de calidad.
Refrigeración del zumo concentrado de uva
La refrigeración puede emplearse cuando el almacenamiento es a corto plazo. En este caso, es ideal mantener el mosto a una temperatura de +4° C, para ralentizar cualquier actividad microbiana, pero sin congelar el producto.
En JULIÁN SOLER disponemos de un sistema de vanguardia para el almacenamiento de mosto. Nuestras instalaciones están equipadas con cámaras frigoríficas y de congelación, diseñadas para mantener inalteradas las propiedades organolépticas y físico-químicas del zumo de uva concentrado, durante todo el año. Específicamente, el mosto es envasado en bidones asépticos, para luego ser cuidadosamente almacenados en nuestras cámaras climatizadas, hasta su expedición. Además, monitorizamos y mantenemos un control riguroso de la temperatura, humedad y otros valores, para superar los estándares de calidad que esperan nuestros clientes.
Transporte del zumo de uva: mosto a granel
El embalaje y transporte del zumo de uva concentrado a granel son procesos críticos que requieren tecnología especializada para mantener la calidad del producto. El envasado se puede realizar en bidones metálicos asépticos, bidones con bolsas asépticas, sistemas IBC u otro packaging aséptico que resulte una barrera eficaz contra el oxígeno, la luz, las bacterias, las partículas, etc. Por ejemplo, las bolsas IBC paletizadas son envases flexibles de polietileno o polipropileno (material de calidad alimentaria), que están montadas sobre palets. Tienen aproximadamente una capacidad de 1.000 litros. Al igual que los bidones, pueden utilizarse tanto para el almacenamiento como para el transporte del mosto. Con cualquiera de estos tipos de envasado, se emplean sistemas de llenado que operan en condiciones estériles.
El envío puede realizarse por vía terrestre, marítima o aérea. El transporte a granel se lleva a cabo en el interior de depósitos aislados, siempre bajo temperatura controlada. Las temperaturas muy altas pueden provocar la oxidación del mosto y alterar su color. Cada método de embalaje y transporte posee sus propias ventajas técnicas y debe seleccionarse en función de la cantidad de producto a enviar, de la distancia del transporte, de los requisitos de conservación del mosto y las especificaciones que solicita el cliente. A continuación, detallamos las principales modalidades y sistemas que se utilizan para el envío de mosto concentrado a cualquier parte del mundo:
Flexitanks
También conocidos como contenedores flexibles o flexibags, son bolsas de polietileno que se instalan dentro de un contenedor frigorífico, pudiendo transportar hasta 26.000 litros. Representan un sistema seguro y eficiente para el transporte marítimo del mosto. Son de un solo uso (material reciclable), higiénicos y de gran resistencia. También están los trucks flexitanks, que son bolsas especialmente diseñadas para el transporte de líquidos por carretera, mediante camiones, tanto para distancias largas como cortas.
Camiones frigoríficos
Estos vehículos permiten transportar el zumo concentrado de uva por carretera y conservarlo refrigerado o congelado durante todo el recorrido. Están equipados con un sistema de refrigeración que mantiene una temperatura constante y controlada dentro de la caja, permitiendo la regulación entre los 12° C y -20 C. En la fase de expedición, se realiza el pre-enfriamiento del camión frigorífico antes de cargarlo, para que alcance la temperatura exacta de traslado. Después se carga el camión con los tambores paletizados o con los pequeños contenedores Goodpack.
Goodpack
Este sistema de embalaje consiste en el uso de contenedores reutilizables que destacan por sus características especiales. Por ejemplo, sus paredes laterales son plegables, para facilitar su almacenamiento cuando no están en uso, e integran etiquetas RFID, que permiten el seguimiento y localización precisa de la mercancía. Pueden ser utilizados en el almacenamiento o transporte de mosto a granel, tanto en camiones frigoríficos como en contenedores reefer. De cualquier forma, optimizan el uso del espacio.
JULIÁN SOLER: mosto de calidad durante todo el año
Nuestro compromiso con la excelencia se refleja en cada paso que damos en el proceso de producción, almacenamiento y transporte de nuestro zumo concentrado de uva. Contamos con sistemas de refrigeración y congelación de alta capacidad, lo que nos permite almacenar eficientemente más de 6.000 toneladas de zumo de uva concentrado en estado refrigerado y hasta 12.000 bidones en congelación, manteniendo intactas las propiedades organolépticas y nutricionales de nuestro producto. De esta forma, podemos suministrar mosto auténtico y de alta intensidad colorante durante todo el año.
Somos líderes en la exportación de zumos concentrados de uva, blancos y tintos. Realizamos el embalaje y el envío, por aire, tierra o mar, según las características del mosto y las necesidades del cliente. Utilizamos sistemas de envasado asépticos, en bidones, contenedores IBC, flexitanks, etc.
Garantizamos en todo momento la alta calidad de los concentrados de uva, mediante procesos de control y análisis en nuestro propio laboratorio. Además, disponemos de departamento I+D+i, para el desarrollo e impulso de la innovación alimentaria.
A través de nuestro know-how llegamos a los 5 continentes y a más de 48 países. Somos tu Global Grape Solution Supplier. Solicita información, sin compromiso.