Si algo caracteriza a nuestro sector es su origen milenario. Las uvas se cosechan y se utilizan desde hace muchos siglos y, si queremos que puedan seguir formando parte de nuestra industria y nuestra cultura, debemos cuidar todo lo que las rodea. La sostenibilidad es la clave para conseguirlo.
La sostenibilidad en el ADN de Julián Soler
- 5 pilares sobre sostenibilidad en la producción de mosto en Julián Soler
- Uso de energías limpias
- Biodiversidad en el ecosistema
- Gestión de residuos
- Cadena de valor
- Economía local
- El futuro sostenible del sector de la alimentación vitivinícola
- La responsabilidad social juega un papel fundamental
- El ejemplo de la sostenibilidad y RSC de Julián Soler
Los 5 pilares sostenibles en la producción de mosto Julián Soler
A la hora de llevar a cabo nuestra estrategia, en la que la viabilidad del negocio debe ir de la mano con la sostenibilidad de todo el proyecto, en Julián Soler trabajamos sobre 5 planes de actuación:
1- Uso de energías limpias en el proceso de producción de nuestros zumos concentrados de uva
Uno de los objetivos principales en Julián Soler es la reducción de nuestra huella de carbono en todo el proceso único desde que entra la uva en nuestras instalaciones hasta su expedición. En nuestras instalaciones solo utilizamos energías limpias durante la producción del mosto, haciendo uso de biomasa (cáscaras de almendras de producción local) y gas natural, por lo que no entra en juego ningún tipo de fuel.
Estas energías no generan residuos en su combustión, por lo que ya supone un importante impulso para nuestro Plan de acción en cuanto a energías limpias. Pero, además, contamos con una instalación fotovoltaica de 348 m2 y 260 módulos, con la que producimos parte de la electricidad que consumimos a través de la energía solar no contaminante.
2- La importancia de la biodiversidad en el ecosistema de nuestra tierra
Nuestro compromiso siempre ha estado encima de la mesa en cualquiera de nuestros avances, tanto con las personas como con el medio ambiente. Por eso, en los últimos años hemos invertido en una línea de mosto concentrado que se produce de manera sostenible en nuestros campos.
Estos nuevos métodos favorecen el anidamiento de aves y protege las lindes naturales para mantener el buen estado de la fauna autóctona. De esta forma, conseguimos proteger la biodiversidad de las zonas de viñedos con una visión especial sobre tres elementos naturales claves de nuestro entorno:
- Nidos
- Madrigueras
- Lavajos y charcas
3- Gestión de residuos y tratamiento de agua en nuestro proceso único
La gestión de residuos es uno de los puntos más importantes de nuestro ciclo de producción, que siempre ha tomado una relevancia absoluta. El principal residuo que generamos en Julián Soler es el agua vegetal procedente del proceso de evaporación del mosto, por lo que tomamos parte de esta agua y lo reutilizamos para el regadío de nuestros propios viñedos. De esta manera, ‘devolvemos’ a las uvas su propia agua.
Además, disponemos de una planta depuradora de aguas residuales (EDAR) propia, en la que procesamos las aguas generadas para su máxima filtración. Estas aguas se devuelven, una vez limpias, al cauce del río Valdemembra.
4- Cadena de valor de la producción de mosto en Julián Soler
Nuestra cadena de valor comprende todas las fases de nuestra producción, con un compromiso máximo con los agricultores y otros agentes involucrados. Trabajamos bajo un modelo ético y responsable, ayudando a nuestros agricultores locales a poner en valor sus cosechas y las uvas que recolectamos.
Tras la vendimia, con la uva aún fresca, se descargan directamente en nuestras instalaciones y se controlan a través de una trazabilidad completa para maximizar la seguridad del producto. La cercanía de nuestras instalaciones y la recolección de nuestras propias uvas nos convierte en uno de los pocos productores que elaboran mosto a partir de variedades locales.
5- Fomento de la economía local de la uva y del mosto
Unido al punto anterior, queremos señalar la importancia de nuestra actividad empresarial en la comercialización de un producto autóctono y local como es la uva castellano-manchega. En nuestras propias instalaciones recibimos uvas de más de 300 agricultores de la comarca de La Manchuela, a los que les aseguramos unas condiciones inmejorables en su trabajo.
El uso de las variedades de uva locales como Bobal o Garnacha Tintorera no hace más que reafirmar nuestra filosofía de cercanía y compromiso local. Este ha sido la base de nuestra esencia en los últimos 50 años, y lo seguirá siendo.
El futuro del sector de alimentación y bebidas pasa por un modelo sostenible
Desde Julián Soler creemos que el sector en el que nos movemos todavía tiene mucho futuro, pero debe adaptarse a los tiempos como lo están haciendo otras industrias. La importancia de cuidar de nuestro entorno y de asegurar la viabilidad tanto de las tierras como de los propios negocios debe ser una prioridad para todas las empresas.
Pero la sostenibilidad del sector de la alimentación vitivinícola no solo implica un cuidado medioambiental, sino también del producto. Debemos poner en valor la calidad de las uvas y mostos de nuestra zona, involucrando a todos los agentes y logrando unos acuerdos comerciales justos para que se pueda continuar una producción tan antigua como las primeras civilizaciones.
La RSC juega un papel fundamental en las empresas
La gestión sostenible de los recursos y los productos, como hemos visto, han cobrado una relevancia especial en los últimos años. Somos muchas las empresas que creemos en ello, y muchos los clientes que lo demandan. La ética medioambiental, social y de buen gobierno deben ser la guía para todos.
Se trata de un cambio estructural completo, una visión diferente de lo que hasta ahora se hacía en la mayoría de compañías, y una transformación máxima en la gestión de las organizaciones. Pero estos cambios van a producir importantes mejoras tanto en las empresas como en los consumidores, y también en los productores de la materia prima.
Para conseguirlo, es importante centrar nuestros esfuerzos en una gestión global que nos lleve a una transición en la que todos quepamos.
El compromiso con la RSC
Nuestro compromiso queda reflejado a través de los certificados e informes externos que lo acreditan, como el que superamos el año pasado. Se trata de una auditoría SMETA de 4 pilares, una metodología de auditoría ética que abarca todos los aspectos de la práctica comercial responsable.
Las auditorías SMETA usan el Código base de la ETI, basado en las normas de la Organización Internacional del Trabajo, así como en las leyes locales relevantes. Los dos pilares obligatorios para cualquier auditoría SMETA son Normas de trabajo y Salud y seguridad. Los dos pilares adicionales de una auditoría de 4 pilares son Ética empresarial y Medio Ambiente.
Además, somos miembros de plataformas que facilitan la transparencia y el intercambio eficiente de información tales como SEDEX y EcoVadis. A través de estos últimos colaboramos en materia de sostenibilidad con una plataforma común, una ficha de evaluación universal, indicadores y herramientas de mejora del rendimiento en materia de sostenibilidad.
Exportamos a más de 48 países en los 5 continentes.
Por último, queremos destacar la importancia de otros proyectos como Vidartis. Esta idea surge en el ámbito de Responsabilidad Social Corporativa e Innovación, y está liderada por Ana Soler para dar cabida a diferentes artistas castellano-manchegos.
La Directora de Calidad de nuestra organización ha desarrollado este proyecto en el que se presentan 24 obras creadas tanto con la materia prima de la uva tinta como con mosto blanco. Haciendo honor a nuestra tierra, se han utilizado variedades como bobal o garnacha tintorera en la elaboración de estas piezas únicas.
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